Instalación que recrea “El Gigante de Tarapacá”, el petroglifo antropomórfico más grande del mundo, ubicado en una ladera del cerro Unita en la localidad de Huara, región de Tarapacá, en una escultura a gran escala hecha con prendas de ropas extraídas del vertedero de Alto Hospicio, uno de los mayores del mundo.
El proyecto -creado por los arquitectos y docentes de la Universidad Finis Terrae, Victoria García y Andrés Echeverria- usa tres formas de expresión artística (arte rupestre, arte textil y land-art) para llamar la atención sobre el problema de los vertederos de ropa, y generar reflexión sobre cómo el modelo cultural, basado en lo desechable, pone en peligro nuestra permanencia en el mundo.
La obra es de carácter efímera, permaneciendo en el lugar tres días para luego ser desmontada sin dejar huella alguna de su existencia y llevada a un centro de reciclaje.
El proceso de trabajo para la construcción de la obra será parte de una muestra itinerante por Chile en que se montará la obra en distintas localidades para crear conciencia del problema de la contaminación en el desierto, y el valor del patrimonio natural y arqueológico de la zona.