La obra Espiral de Osvaldo Peña destaca como una imponente escultura urbana, difícil de ignorar para quienes transitan por Nueva Tajamar, en Las Condes. Su vibrante amarillo y su gran tamaño la convierten en un punto de referencia frente al moderno edificio World Trade Center, en pleno centro de negocios de Santiago.
Desde 1995, Espiral se erige en este espacio, confrontando al espectador con un enigma: un hombre camina en un espiral de acero y fibra de vidrio que crece en amplitud, simbolizando los ciclos de la vida y las tensiones existenciales del ser humano. En su trayecto, el personaje aparece de cabeza, como si el recorrido mismo lo forzara a replantear su sentido y propósito.